Si hay algo en la vida que ocurrirá
inevitablemente son los gastos imprevistos. El problema está precisamente allí:
son IMPREVISTOS, en consecuencia es mejor planificar un fondo para emergencias,
gastos de salud y demás gastos indirectos, que suelen presentarse en el momento
menos apropiado, para que no nos pillen desprevenidos. ¿Cómo hacer esto? A
continuación algunos consejos útiles para economizar sin realizar grandes
sacrificios.
1.
Evite abrir varias cuentas bancarias.
Aunque probablemente el consejo sea innecesario, vale mencionarlo. El
mantenimiento de múltiples cuentas bancarias y/o tarjetas de crédito, según el
caso, puede representar un egreso inútil, a menos que sea absolutamente
necesario. En lugar de eso, es mejor llevar cuenta detallada (con los
respectivos comprobantes) de los ingresos/egresos mensuales, así como revisar
en detalle los estados de cuenta bancarios a fin de mes, para verificar cuentas.
2.
Compre al contado. Si en algo aprecia el
dinero fruto de su duro trabajo, evite caer en la trampa de las tarjetas de
crédito y los créditos bancarios, a menos que sea REALMENTE imprescindible. El
error más usual es dejarse seducir por ofertones de productos “que jamás
volverán a rebajarse tanto”. Por lo general,
TODO almacén realiza ofertas de temporada, al
menos una vez al año. Prefiera
los créditos CERO por ciento de interés a pocos meses, y verifique si no hay
precios ocultos, que solo aparecerán el en estado de cuenta, cuando sea muy
tarde para presentar reclamos.
3.
Guarde al menos un 25% de sus ingresos extra. ¿Por qué un 25%? ¿Y por qué no un 30%?, dirán algunos. En realidad
la proporción es solo una referencia, pero el valor más adecuado está en sus
manos, y en realidad depende del monto
del ingreso adicional: mientras mayor sea la cantidad, menor la proporción. La
ventaja de los ingresos extra es que es una suerte de dinero caído del cielo;
el inconveniente está en que todo ingreso de este tipo suele gastarse en cosas superfluas.
El mejor remedio para esto es ahorrar una parte de ese ingreso, en la
proporción que considere más apropiada, pero de ser posible, que no sea
inferior al porcentaje sugerido, o mayor, según su caso (y buen juicio).
4.
Pague a tiempo sus facturas de consumo para evitarse recargos. Aunque parecieran montos pequeños, si suma los recargos de todo un
año de TODAS sus facturas, notará que estos pueden llegar a 100 euros o más,
según el caso, y a nadie le vienen mal cien euros adicionales en el banco, como
premio a la puntualidad.
5.
Lea la letra pequeña, y escuche las experiencias de otros
consumidores. Por desgracia, abundan en estos días
las empresas y personas inescrupulosas, que pasan de todo y todos con el fin de
conseguir llenarse los bolsillos sin importarles su propio futuro, menos aún el
de sus clientes. Lea detalladamente los contratos de servicios (como los de las
empresas telefónicas), y antes de realizar una compra que considere importante,
visite foros en Internet, que traten sobre comentarios sobre productos/servicios
de la empresa en la que llanea comprar.
HomeMoney
es un producto de finanzas personales que se puede
utilizar para el análisis de presupuesto, gastos y logro de objetivos, aplicado a la
contabilidad doméstica en línea.